Hay historias que desgarran, y por mucho que tratemos de curarlas, dejan cicatriz en las entrañas. Este es el caso de Voces de Chernóbil, de Svetlana Aleksiévich, una obra cargada de sentimentalismo donde se recogen testimonios reales de personas que vivieron la barbarie de Chernóbil desde aquel 26 de abril de 1986. Historias contadas desde el corazón que plasman lo humano de la historia y que durante años permanecieron silenciadas por el régimen de las URSS.

Espléndido, conmovedor y sobrecogedor a partes iguales, así es este ensayo narrado de forma literaria por la Premio Nobel de Literatura 2015 Svetlana Aleksiévich, en el que se detalla la historia de un pueblo valiente y fiel a sus convicciones y que dio la vida por salvar a la humanidad. Una historia, además, que cuenta las vergüenzas de un sistema en descomposición que ocultó la mentira más peligrosa hasta el presente. Pero, ante, todo, esta es la historia del amor. La historia del amor perdido.

El lector, con este peso emocional en sus manos, es capaz así de viajar hasta el lugar de los hechos y sentir la desgarradora verdad en carne propia. Un lenguaje común a todos los humanos y que no se escapa de ninguna mente: el lenguaje del corazón.

En definitiva, de esas lecturas profundas e imborrables que se agarran a la piel y te arañan por dentro.

«Se ha roto el hilo del tiempo, de pronto el pasado se ha vuelto impotente.»

«Dime, hija, ¿has comprendido mi tristeza? Se la llevarás a la gente, pero puede que yo ya no esté. Me encontrarán en la tierra. Bajo las raíces.»

Historias selladas que claman desde la tierra. Y desde el cielo.

Demos paso a sus voces.